Apenas salí a la calle me di cuenta que se me había quedado el paraguas. Pero como a estas alturas me juro valdiviana, apuré el paso nomás, para llegar a tiempo a la charla de Gonzalo Oyarzún, responsable del Sistema Nacional de Bibliotecas Públicas de Chile.
Además de rompernos a todos el corazón con la certeza de que el olor a libro ya no es lo mismo de antes porque hace décadas se usa una tinta que no da olor, Gonzalo Oyarzún nos conmovió mostrándonos cómo las bibliotecas públicas han llevado oportunidades digitales a localidades aisladas de nuestro país, permitiendo, por ejemplo, que señoras artesanas o que producen alimentos como miel, se puedan dar a conocer, organizar y promocionar sus actividades.
También nos enseñó sobre la Biblioteca Pública Digital, que al ser una aplicación, es una GRAN herramienta considerando que hay 3 smartphones por chileno en la actualidad, en promedio.
Además de contarnos que hay más de 25 mil títulos gratuitos, algunos para descargar y otros para arrendar (lo que tiene el incentivo de tener que efectivamente leer el libro y no abandonarlo en un disco duro), que se pueden leer en múltiples dispositivos sincronizados (o sea que si en el celular lo dejé en la página 45, en el ipad lo retomo y sigo donde mismo), que son de categorías diversas (clásicos, best sellers, premios nobel, etc), nos contó de la estrategia de contingencia que tienen sus redes sociales, que francamente me encantó.
Medio prima con la estrategia de Carabineros de Chile, la estrategia de la Biblioteca Pública Digital, aprovecha acontecimientos y la contingencia nacional para promover sus títulos, lo que les permite generar flujo a su sitio y por supuesto, cumplir el objetivo de que haya más chilenos leyendo en todas partes. Así, para los polémicos partidos de Chile/Argentina, recomienda títulos adhoc. Para el Lollapalooza, recomendó títulos que tienen que ver con música, por ejemplo. Asimismo, que se apalancan con el meme de moda para sacar esa risa mental tan necesaria en twitter y generar engagement con su comunidad. Porque tal como finalizó su charla, las malas bibliotecas construyen colecciones, buenas construyen servicios, y las mejores crean comunidad.
La siguiente charla estuvo a cargo de Cristián Campos Melo, director del programa Tecno Ciencia de Canal 13C.
Haciendo hincapié en que la C de 13C es de cultura, Pelao Campos habló desde la pasión misma que significa ser divulgador científico y las responsabilidades que eso conlleva, aun siendo un camino que él eligió y más que nada, se ha ido creando paso a paso, junto al equipo.
Pelao Campos nos hizo ver que a Chile le falta mucho en construcción de identidad, sobre todo científica. Falta que nos relacionemos con el patrimonio y es por eso que Tecno Ciencia hace una propuesta de valor al intentar acercar el patrimonio, por ejemplo arqueológico, a las audiencias.
Su propuesta es ser un intermediario entre los científicos y la gente, tanto espectadores del programa, como también usuarios digitales, quienes gracias al minuto a minuto difundido por las redes sociales del programa cuando se están grabando los capítulos, pueden hacer preguntas directas a los científicos y por supuesto, entregar algo de vuelta al contenido mismo del programa.
Así, Pelao Campos y Tecno Ciencia apuntan a sacarle provecho a la convergencia de medios y plataformas en que se puede acercar la ciencia y la tecnología a las comunidades. Primero, de una forma cercana, fomentando la capacidad de asombro. Segundo, diversificándose, por ejemplo, con el libro Tecno Ciencia en Ruta que tiene su complemento en www.tecnocienciaenruta.cl y la app disponible para android.
Aún hay un camino largo por recorrer, pero sin duda que así como Pelao Campos y su equipo se hacen cargo de una parte, somos nosotros como espectadores y consumidores del contenido, quienes tenemos la posta para participar y ayudar a que la divulgación científica avance en un camino de masificación.
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